la Influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa provocada por los virus que infectan la nariz, la garganta y en algunos casos los pulmones. Este virus puede causar una enfermedad leve o grave y en ocasiones puede llevar a la muerte. La mejor manera de prevenirla es vacunándose todos los años.
Por lo general esta enfermedad comienza de repente, algunos de los síntomas son:
- Fiebre con escalofríos
- Tos
- Dolor de garganta
- Secreción o congestión nasal
- Dolores musculares o corporales
- Dolores de cabeza
- Fatiga (cansancio)
- Algunas personas pueden tener vómitos y diarrea, aunque esto es más común en los niños que en los adultos.
*Es importante mencionar que no todas las personas presentan fiebre.
La influenza se transmite principalmente a través de las pequeñas gotas que se producen cuando las personas tosen, estornudan o hablan. Estas gotas pueden caer en la boca o en la nariz de las personas que se encuentran cercas, así como en superficies que al entrar en contacto con las manos transportan el virus y pueden contagiar a la personas si tocan su boca, nariz ó sus ojos sin lavarse previamente las manos.
Los niños y las personas de 65 años de edad en adelante son los más propensos a contraer la enfermedad. Usted puede contagiar a otra persona antes de saber que está enfermo, y también mientras lo está.
- Las personas enfermas son más contagiosas en los primeros 3 a 4 días después de la aparición de la enfermedad.
- Algunos adultos sanos pueden contagiar a los demás desde 1 día antes de que se manifiesten los síntomas y hasta 5 a 7 días después de contraer la enfermedad.
- Algunas personas, en especial los niños y las personas con sistemas inmunitarios debilitados, podrían causar contagios por un tiempo más prolongado.
El tiempo desde la exposición de una persona al virus hasta el comienzo de los síntomas es de aproximadamente 2 días, pero puede oscilar entre 1 a 4 días.
Las complicaciones pueden incluir neumonía bacteriana, infecciones del oído, sinusitis y agravamiento de las afecciones crónicas, como insuficiencia cardiaca congestiva, asma o diabetes.
Se ha demostrado que la vacuna reduce la aparición de enfermedades relacionadas y el riesgo de sufrir complicaciones graves a causa de esta enfermedad que pueden dar lugar a hospitalizaciones ó incluso la muerte.
Recuerda que hay tratamiento ya contraída la enfermedad por lo cuál es muy importante que acudas al médico oportunamente al resfriarte si no te vacunaste para que te valoren y recibas el tratamiento adecuado para recuperar tu salud sin poner en riesgo tu vida y las de los tuyos.
Nuestro equipo médico profesional en salud esta a tu servicio, que esperas has tu cita ya y recupera tu salud.